El presidente Bernardo Arévalo firmó el Decreto 18-2024, que beneficiará a más de 109 mil extrabajadores del Estado mediante un incremento en sus jubilaciones. Esta nueva normativa garantiza que las clases pasivas del Estado recibirán mensualmente aportes que no serán menores a un salario mínimo agrícola, ni mayores a 7 mil quetzales.
Esta medida fue aprobada por el Congreso de la República el 10 de septiembre con el objetivo de dignificar a quienes han servido al Estado a lo largo de su vida laboral. El decreto, que se publicará próximamente en el Diario de Centro América, contempla que a partir de 2025 todas las pensiones se incrementarán en mil quetzales.
Además, si alguna pensión, aún con este aumento, no alcanza el salario mínimo agrícola de 3 mil 634.59 quetzales, las autoridades deberán realizar los ajustes presupuestarios necesarios para asegurar que se cumpla este monto. Asimismo, la norma asegura que, si un jubilado regresa a un cargo público, su jubilación cesará de inmediato.